El partido más esperado de la Premiership llegaba hoy tras el parón futbolístico debido a los compromisos internacionales. Aberdeen y Celtic se han visto las caras en Pittodrie, en un extraordinario encuentro donde los amantes del fútbol escocés hemos podido disfrutar de lo lindo.
Ambos conjuntos han salido sin miedo y buscando el área rival. Ha sido sorprendente la propuesta de los Dons, que en vez de quedarse tras esperando una contra, han presionado al conjunto de Ronny Deila desde el primer instante del partido. Rooney y McLean han sido los hombres más activos del Aberdeen en la primera media hora de juego. Este último hacía un gran gol de cabeza anulado por el colegiado antes de llegar al minuto 30 de partido.
No obstante, el Celtic ya había llegado con peligro a la meta de Ward. Griffiths había estrellado un disparo de falta en el travesaño de la meta del Aberdeen en la ocasión más clara para los Bhoys. Precisamente Griffiths iba a ser protagonista. Sobre él se ha producido el pealti que él mismo iba a transformar. Un error garrafal de Considine derivaba a Griffiths en el área pequeña, provocando el penalti que traería el 0-1, resultado con el que se llegaba al descanso.
La segunda mitad ha comenzado con un Celtic más confiado. Los pupilos de Deila han salido con una mentalidad incorrecta, especialmente para este tipo de encuentros. Los Dons lo han aprovechado a la perfección, y han logrado empatar el encuentro. De nuevo, el colegiado ha pitado penalti en una dudosa acción de Boyata sobre Rooney, que ha transformado desde los 11 metros engañando completamente a Gordon.
El 1-1 ha caldeado Pittodrie y el Aberdeen se ha contagiado de esa euforia. Los rojillos han sido los protagonistas en la última media hora, en la que se quedaban con un jugador menos debido a la expulsión de Hayes, que veía la roja directa tras una tangana con varios jugadores del Celtic.
A pesar de ello, no se han venido abajo y en el minuto 84 Quinn ha reventado las gradas de Pittodrie con el segundo gol para los locales. Un gran remate del central ha acabado al fondo de la red, culminando una remontada histórica para los de McInnes.
No obstante, el Celtic ha podido amargar la remontada local. Considine -protagonista en el gol del Celtic salvaba a los suyos sacando bajo palos un remate del ariete Griffiths. Finalmente, no se ha movido el electrónico en una tarde que se recordará durante mucho tiempo.
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